domingo, 21 de agosto de 2016

“Titirimeo… echo tierrita y no juego más”



Un texto de Jan Thomas Mora dirigido por Maigualida Gamero
“Titirimeo… echo tierrita y no juego más”
El encuentro con sus temores les devolvió aquella imagen desfigurada y aterradora de sus propias miserias.


Jennifer Morales y Abilio Torres en su interpretación. 
Pablo Sabala

Un concurso de oposición es el marco de la confrontación de dos almas expuestas a una agobiante espera, la explosión de sus miedos, frustraciones y sentimientos forman un remolino del que solo quedarán restos esparcidos… pedazos de un nuevo naufragio en sus vidas.

“Titirimeo” no es sólo un fragmento caótico de la vida de Ángela y Gabriel, no es solo el transcurrir de los minutos flotando en la angustia, en la espera de lo inevitable, “Titirimeo” desnuda rasgos humanos que forman parte de una naturaleza oscura, egoísta y que late con fuerza en ese interior que muchas veces no queremos saber que existe.

En esta obra se desnudan las miserias humanas, los miedos, ese reflejo que nos atemoriza y nos mira desde la comodidad y que aflora como bestia enjaulada, empujada por una situación que ejerce la presión justa desbordándonos. 

Ángela se destroza con cada tic-tac del reloj que resuena en su mente como martillos anunciando fatalidad, su mente juega a las suposiciones y lo inverosímil toma cuerpo en su realidad, sus pensamientos más secretos flotan y se enfilan como dardos a la mente de Gabriel que aunque lucha por controlar sus demonios, finalmente sucumbe. Ambos personajes saltan al abismo y sin  piedad se desgarran en verdades, supuestos, añoranzas y sentimientos encontrados. Se enfrentan, se confrontan, se hacen daño, se olvidan del otro.

Es un texto enriquecido de humanidad, de esas contradicciones internas de nuestros mundos, “Titirimeo” es un reflejo aflorado de nuestros miedos y temores.

Si bien el texto ofrece una extraordinaria semblanza de nuestra imperfecta humanidad, es indispensable señalar y considerar los aspectos de su puesta en escena.

Jennifer Morales y Abilio Torres en esta propuesta asumieron encarnar a Ángela y Gabriel. Una interpretación destacada, limpia y cargada de expresión y teatralidad. Con una frescura deliciosa y un ritmo impecable construyeron este universo escrito y le dieron vida. Una vida escénica donde destaca su interconexión actoral, su dominio expresivo, su atinado sentido y precisión en la ejecución de su gestualidad, todo un deleite para el espectador. Definitivamente vale y por mucho darse la oportunidad de disfrutar este trabajo actoral.

La dirección de Maigualida Gamero es acertada y precisa, demuestra una interpretación minuciosa del texto en su transición hasta la escena. La escenografía y composición sin desperdicio, eleva el simbolismo y refuerza ese mundo interior en que se desplazan los personajes durante su interminable espera.

Es sin lugar a dudas un gran trabajo, logrado por un equipo talentoso al que es necesario reseñar, ese equipo que está ahí siempre tras la escena y que hace posible un maravilloso resultado. En la asistencia de dirección estuvo Rafael Tinedo, el vestuario pertenece a Joaquín Nandez (Premios de la Alta Moda en Francia), la escenografía es del artista plástico Armando Zullo (Premio Municipal de Caracas), la iluminación de David Blanco (Premio Municipal de Caracas), la dirección de arte y diseño de Yoelia Nicol Mora y la producción general de Elmer Eduardo Pinto.

domingo, 7 de agosto de 2016

Fuera de Regla, cantos de un juego macabro



“Fuera de Regla” de Jan Thomas Mora Rujano

Cantos de un juego macabro

"En el encierro de las almas, los demonios disfrazados de ansias, toman el control de lo inevitable".

Adriana Bustamante y Jennifer Morales
Describir una soledad aislada de susurros, un mundo de lazos emocionales contenidos por el olvido, dos personajes latiendo desesperados, tratando de encontrar sin éxito en las letras de  ficción, una realidad que sustituya ese pequeño universo al que se reducen sus sueños. Eso es “Fuera de Regla”.

¿Son acaso estos dos personajes el reflejo de uno solo atrapado en su propio juego? Son dos y uno a la vez, alter egos desfigurados, desgarrados por la frustración, presos sumisos de un sueño repetitivo e interminable. Es difícil decantar y distinguir la verdad de la mentira, la ilusión de lo real, es un espacio donde la mente alinea una atmósfera opaca, donde el olvido parece haberse apoderado de todo como arena y polvo sobre el abandono y el tiempo.

Es un canto a las pesadillas o un juego macabro donde sus participantes desgarran sus temores y se diluyen en anhelos de claustro. Aquí se conjugan personajes que quieren ser encarnados por dos almas desesperadas. Sueñan con la libertad que se niegan, viven en un pasado circular que han inventado como excusa de su existencia. Así como la parálisis que les impide regresar a la vida. Son polvo y cadenas, son las carceleras de su mente evaporada de ausencias.

Esto es “Fuera de Regla”.

Debo destacar las actuaciones de Adriana Bustamante y Jennifer Morales, cargadas de una vitalidad que contrasta con el espacio, fuerza interpretativa y conexión están presentes en estos roles que afrontan con gran compromiso. Sin duda, logran arrancar al público de su butaca para secuestrarlo en esa alucinación oscura donde flotan estos personajes.

La dirección de José Gregorio Martínez muy acertada y cargada de simbolismo, de una kinesia enlazada y acorde para reforzar el texto.

Es un trabajo destacado que merece ser visto por la suma de los elementos que le componen. Una muy buena experiencia para el espectador.

Pablo Sabala

viernes, 26 de febrero de 2016

El milagro de las segundas oportunidades

“La Orgía” de Enrique Buenaventura en el II Festival de Teatro Carcelario 2016



Hoy tuve la oportunidad de asistir a la presentación de la pieza teatral “La Orgía” de Enrique Buenaventura, llevada a escena por el grupo de teatro COCUC del Complejo Carcelario de Cúcuta en el Teatro Zulima, en el marco del II Festival de Teatro Carcelario 2016.
Esta es una pieza que forma parte importante del acervo teatral colombiano, al igual que su autor; en ella se nos dibuja el lado oscuro de nuestra sociedad, consumida por las incongruencias, por la injusticia, por el desequilibrio, donde el poder, el dominio y la farsa se ponen de manifiesto a través de personajes marginados.
Cabe destacar que el elenco que llevó a escena esta obra está conformado por privados de libertad, que forman parte de un proyecto-proceso que utiliza al arte teatral como una herramienta de resocialización, y más que eso, me atrevo a decir, que como mecanismo de generar una nueva esperanza, una forma de explorar emociones y crear nuevas perspectivas en estas personas, que la igual que todos, siguen teniendo sueños.
La directora de la pieza, Nancy García, ha logrado descubrir y desarrollar en estos nóveles actores y actrices interesantes promesas de las tablas. La puesta en escena es sobria y sencilla, no hay grandes efectos especiales o de iluminación, lo que sí está muy presente es un interesante trabajo actoral que logra crear la atmósfera de la obra y mantener al público interesado en la escena.
Los personajes se ven vivir en el escenario, formando parte de la acción.
Deibis Mildred Castro quien da vida a la Vieja, nos la muestra como un personaje oscuro, atrapado en sus días pasados donde era “alguien”, Deibis nos hace una caracterización que logra mantener a lo largo de la obra con una muy buena expresión facial y corporal, buen sentido y percepción del escenario y de los tiempos escénicos.
Por su parte José Alberto Segura Ortiz, quien interpreta al Mudo, hijo de la vieja, hace un trabajo extraordinario, no solo en lo corporal, sino en su interrelación con el espacio y el personaje de la Vieja, demuestra grandes cualidades actorales y deja claro que un personaje para resaltar no necesita de grandes textos.
También tenemos a Huverney Restrepo Foronda, quien interpreta al tísico Mendigo I. Huverney hace un buen trabajo actoral, se ve la construcción de un personaje y su interrelación con los demás, buen manejo de los elementos en escena y de las transiciones.
Después es la aparición de Diego Esteban Zapata Quintana, quien interpreta al Mendigo II, de Diego destaca notablemente su voz y claridad en la dicción, buen manejo de los tonos e intenciones, y tiene un especial don para la comedia.
Tenemos luego la llegada de Heinson Sebastián Urbina Moncada quien tuvo la responsabilidad de dar vida al lisiado Mendigo III, su trabajo es muy bueno, tanto en lo corporal, como en su manejo del ritmo, matices y construcción del personaje, tiene fuerza en su interpretación.
Finalmente hace su entrada a escena Caty Carolina Martínez quien hace a La Enana, de Caty resalta su presencia escénica, buen sentido del espacio y del ritmo.
“La Orgía” no es una obra fácil, requiere de experiencia y condiciones actorales. Es sorprendente el resultado logrado por Nancy García con estos jóvenes, y no me refiero solamente al tema actoral, sino a lo logrado en el espíritu de cada uno de ellos; y digo sin temor a equivocarme que para ellos hay un antes y un después en su vida; un antes y después del teatro.
Queda demostrado el gran poder transformador del arte teatral y espero que este tipo de iniciativas continúen cada vez con más fuerza para seguir demostrando que eso de las segundas oportunidades no deben ser solo palabras, sino acciones como estás que reivindiquen y den esperanza a quienes se equivocaron y hoy quieren hacer de su vida, algo diferente.
Mis más sentidas y sinceras felicitaciones a todos aquellos que aportaron para hacer realidad tan maravilloso proyecto.
Pablo Sabala
Dramaturgo-Director Teatral

miércoles, 9 de marzo de 2011

Que hago

Qué hago con la ausencia que no tengo,
con la cadena de momentos
y el recorrido inerte de tus besos
inexistentes

Qué hago con mi nostalgia incrustada,
los hilos de tu mirar
y el leve respiro de tus manos
transparentes

Qué hago con la muerta melancolia,
con mis labios derretidos
y tu piel hecha cenizas con sabor a
pensamiento

Qué hago con el alma helada silenciosa,
con mis letras, mi voz
y la distancia inevitable que me mira
somnolienta

Qué hago si ya nada puedo hacer
el tiempo se escurrió sobre mi sombra
y me borró la luz de tu memoria...

©PabloSabala

Azul

Azul vetado que me mira
displiciente en la penumbra,
entrelazado con el mar silente
me deja estelas de espuma

Azul caído sobre el aire preso
entre barrotes de arena espejo,
deja recuerdos en la mesa oscura
mientras la voz en diluido escapa

Azul que reverbera espacios
enquistados en la espera hiriente,
bordando aromas de piel amada,
un etéreo grafema de sollozos

Azul que me tocas,
que me escuchas
y cubres la luz de mis ojos,
azul que me acaricias,
me respiras,
letras de mi tiempo azul

©PabloSabala

Dejo...

Dejo mi barniz helado sobre tu piel
cuando el beso te libera hacia Morfeo,
y el aliento descansa custodiado
por las lineas de mi luna transparente

Dejo mi calor de nácar enredado
con el frágil canto de tu boca adormecida,
y el rubor te mira en la sonrisa
en pinceladas turbulentas de agonia

Dejo mi reflejo en los rincones
para verte recorrer la luz que nos arropa,
y tu figura es agua soluble, transitada,
manantial que aflora sin recuerdos

Dejo mi voz, mi aire y recorrido,
dejo mi luz y mi alma,
dejo letras sin voz
como epitafio silente...

©PabloSabala

Encuentro

Encuentro tus ojos de paso,
tu voz confundida,
tu luz pesada,
te miro

Encuentro tus manos yermas,
tu luna ausente,
tu sol herido,
te espero

Encuentro tus labios tibios,
tu sangre helada,
tu piel perfecta,
tu aire mío,
te veo

Encuentro en ti mi reflejo,
tu boca en ansias,
tu sueño preso,
no existo

©PabloSabala

viernes, 6 de agosto de 2010

Despertar



Él despertó una mañana y se dio cuenta que a su lado dormía una extraña mujer que nunca habia visto... Habían retratos de ella por todas partes, su perfume estaba presente en cada rincón de la casa, su presencia era un hilo interminable de circunstancias borrosas... después de preparar el café se percató que estaba en la casa equivocada...

lunes, 2 de agosto de 2010

"Simplemente Simón" (fragmento)


SIMÓN: ¿Mi historia? (Ríe con cinismo) Aún sigo vagando en los Andes entumecido de frío, y empuño mi sable en los campos llenando una y otra vez mis manos de sangre, continúo suspendido en el aire recibiendo la mirada subversiva de Piar y la sonrisa traicionera de Santander… sigo abarrotado de insomnio buscando la fórmula para hacer de los sueños una realidad palpable, sigo escribiendo miles de cartas, de discursos, de proclamas, de leyes… de versos arrebatados, tratando de dilucidar un camino, de encontrar una salida… Recorro una y otra vez los senderos de mi patria grande, de mi Gran Colombia, veo los rostros codiciosos que venden el suelo de la nación, escucho a los que se burlan una y otra vez de mi pueblo… ese pueblo cansado de dejar su sudor en la tierra, con sus manos agrietadas y el estómago lleno de lombrices… y la rabia reemplaza los ideales que han asociado a mi nombre… Como Cristo fui tomado como bandera para aumentar riquezas y someter a los débiles… inventaron doctrinas sobre mis pensamientos y las mentiras robaron la esperanza… (Pausa) Yo quiero ser Simón… sólo Simón… el que ama la libertad de la América toda… el que ama a María Teresa y le entrega con el ardor más puro su pasión juvenil…

Fragmento de la obra: "Simplemente Simón" 2010. Pablo Sabala